Se acerca el momento que todos esperamos tan felices y
entusiasmados, se acerca ese examen que somos incapaces de superar, ese
barranco que somos incapaces de saltar. Y nuestra actitud pues es tranquila y sin
miedos, eso es lo que me gustaría decir pero la realidad es que estamos
macerando una actitud que se mueve entre la desesperación, la ira, el cabreo y
el más puro y sincero espíritu asesino.
Tenemos menos de 24 horas para hacer
un trabajo final que supone un 50% de la nota, un examen en el que entran
conceptos inventados por gente antigua e hijadeputa, y una parte teoría en el
examen en la que podemos comer entre frase y frase. Espero que sinceramente
alguien el miércoles se lleve comida a china para el examen, y que el chino del
restaurante haya afilado los palillos con especial esmero.
Y sino siempre puede
pasar que maría teresa de calcuta entre por la ventana mientras hacemos el
examen despidiendo rayos de magia alegría, sangre y hachas, que le parta el
cuello al profesor que nos drogas de nueva generación a todos y que nos vayamos
a la fiesta más cercana a la universidad. Este último caso es igual de probable
que aprobar el examen del miércoles, y sabéis que no estoy para nada preocupado
(la verdad es que si solo me hago el duro para proyectar una imagen que en este
preciso momento soy incapaz de mantener).
Agur!HasTa mañana
Recomendación musical del día:
No hay comentarios:
Publicar un comentario